Tan sencillo como parece; el jarabe de zanahoria, miel y limón sirve para curar la gripe, aliviar la tos con flema, sacar la mucosidad de los bronquios y calmar el malestar causado por el asma.
En este sencillo jarabe se combinan las propiedades curativas de sus ingredientes, actuando como excelente antigripal, expectorante y antitusígeno. La zanahoria aporta buena cantidad de Yodo, el limón es antibacterial, tanto como la miel, que además es antiséptica, expectorante y calmante natural. Veamos cómo se prepara este potente jarabe.
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Ingredientes a la mano

1 zanahoria pelada y rallada
½ limón
2 cucharadas de panela rallada
1 cucharadas de miel
Modo de preparación
Rallar la zanahoria, colocar en un plato y cubrirla con las dos cucharadas de panela rallada. Cuando la zanahoria comience a soltar sus jugos, exprimir y colocar en un envase estéril. Añadir la miel y el jugo del medio limón. Se guarda tapado en un lugar oscuro o en la nevera.
Dosis e indicaciones
Una cucharada tres veces al día es la dosis recomendada a partir de los 8 años. Se debe tener mucho cuidado de no añadir miel en caso de administrarse en niños menores de 1 año y personas alérgicas. No se suministre a personas diabéticas por el alto contenido de azúcares que contiene el preparado, tampoco debe ser ingerido por quienes padecen de gastritis severa porque el limón puede desencadenar en ardores estomacales.
Beneficios del jarabe de zanahoria, miel y limón
- Por ser rico en vitamina A, C y D, por contener antioxidantes y betacarotenos es un eficiente protector del sistema inmune. Al contener Yodo ayuda a optimizar las funciones de la glándula tiroides.
- La acción expectorante de este jarabe limpia la flema de la garganta, saca las mucosidades de los bronquios y corrige las secreciones nasales.
- Alivia la tos porque el efecto antiséptico de la miel elimina bacterias que causan irritación y sensación de picor en la garganta.
- Por favorecer la expectoración despeja las vías respiratorias proporcionando una mejor respiración. Calma la disnea.
Te recomendamos que cuando vayas a adquirir las zanahorias compres las que se hayan producido con métodos de cultivos agroecológicos. Sólo así estarás asegurándote de añadir al jarabe ingredientes cuyos componentes son totalmente orgánicos, libres de componentes perjudiciales para el organismo. Una versión similar a esta fórmula puedes prepararla sustituyendo la zanahoria por rábanos picantes, específicamente para curar amigdalitis y corregir el bocio tiroideo, beneficios que se logran gracias al contenido elevado de Yodo en los rábanos.
Es recomendable que cuando prepares este jarabe lo hagas en cantidades moderadas para evitar que el almacenamiento por largos periodos disminuya su efectividad. Prepare sus remedios caseros siempre bajo condiciones máximas de higiene y no almacene sus preparaciones en frascos, botellas o recipientes que contengan restos de otros medicamentos. Prueba el jarabe de zanahoria y aprovecha sus beneficios para la salud.